Las VPN son una Red Privada Virtual que extiende una red privada de fibra óptica a través de una pública, como Internet. En su origen, estas redes se utilizaban para conectar oficinas remotas o usuarios individuales a la red de su empresa.
Sin embargo, hoy en día cada vez más personas utilizan una red privada virtual en casa debido a las grandes ventajas que tiene este tipo de conexión. Así, por ejemplo, una VPN con fibra óptica también puede utilizarse para asegurar las comunicaciones entre dos puntos a través de una red insegura, como Internet.
Por otro lado, las VPN son una herramienta muy poderosa que nos permite ocultar nuestra ubicación cuando estamos navegando. Esto significa que podemos visitar webs tranquilos y acceder a contenido bloqueado en nuestro país sin ser rastreados. De esta forma, podríamos ver la liga en Eleven Sports sin estar en Portugal, o conseguir suscripciones online más baratas de lo normal.
Por último, las VPN con fibra óptica también nos protegen contra ataques cibernéticos, ya que nos encriptan las comunicaciones. En este artículo te lo contamos todo sobre las VPN y por qué podría interesarte usar una de ellas.
¿Qué es una VPN y para qué sirve?
Como ya hemos visto, VPN significa Virtual Private Network, que traducido al español sería una red privada virtual. Las VPN consisten en un software que se instala en nuestro ordenador o dispositivo móvil y nos permite encriptar nuestras conexiones y cambiarlas de ubicación geográfica.
Veamos ahora para qué sirve exactamente esto:
- Podemos navegar por Internet de forma anónima: al ocultar nuestra IP real, las webs no podrán identificarnos y, por tanto, no podrán recopilar datos sobre nuestros hábitos de navegación.
- Podemos acceder a contenido bloqueado por países o webs: si queremos ver un vídeo que está bloqueado en España, podemos conectarnos a un servidor de Estados Unidos y apareceremos como si estuviéramos allí. De esta forma, también podemos saltarnos las limitaciones geográficas de ciertas webs, como Netflix o Spotify.
- Nuestras conexiones son más seguras: al estar encriptadas, las VPN son una herramienta muy útil para proteger nuestros datos de ataques cibernéticos. En concreto, nos protegen de los piratas informáticos que intentarán robar nuestros datos o hacernos llegar virus a través de Internet.
Distintos tipos de VPN
Existen multitud de empresas que ofrecen servicios VPN y, por tanto, es importante que sepamos cuáles son sus diferencias.
Lo primero que debemos tener en cuenta es qué vamos a utilizar la VPN. Si solo necesitamos navegar de forma anónima o acceder a contenido bloqueado, una VPN gratuita puede ser suficiente. Sin embargo, si vamos a descargar archivos o hacer transferencias de dinero, necesitaremos una conexión más segura y, por tanto, una VPN de pago.
Otro factor a tener en cuenta es la velocidad de conexión. Las VPN gratuitas suelen ser más lentas que las de pago ya que utilizan menos servidores y están pensadas para un uso menos intensivo.
Por último, debemos fijarnos en el nivel de seguridad que ofrece cada proveedor. Para ello, lo mejor es fijarse en si ofrecen protocolos de cifrado fiables, como OpenVPN o IKEv2, o si tienen una función de kill switch.
En cualquier caso, tanto si optas por una gratuita como por una solución de pago, utilizar una VPN con fibra óptica en tu navegación online puede ser una muy buena idea.
